El hongo Chaga es un hongo poliporoso parásito que crece principalmente en abedules en climas extremadamente fríos, como Siberia, Rusia, el norte de Europa, Corea, el norte de Canadá y Alaska.

En la naturaleza, hay una batalla en curso entre Chaga y los abedules: mientras el árbol continúa resistiendo la infección, las redes de micelio de Chaga se propagan dentro del árbol durante décadas, formulando potentes fitoquímicos como una forma de resistir el sistema inmunológico del árbol y eventualmente destruirlo.

El estrés de la lucha entre el huésped y el clima severo es lo que permite que Chaga evolucione, se adapte y se vuelva resistente a los patógenos, produciendo muchos de los compuestos medicinales que atraen a los humanos desde el siglo XII.

Chaga es una sustancia inflamable, con una apariencia similar al carbón quemado, fue utilizada por primera vez como yesca durante miles de años por los ancestros indígenas antes de darse cuenta de su potencial medicinal.

Hoy en día, Chaga se usa como tratamiento homeopático para enfermedades cardíacas, diabetes, cáncer de intestino/estómago, enfermedades hepáticas, parásitos, gripe estacional, infecciones virales, dolor de estómago y tuberculosis. Se considera que este hongo tiene los niveles de antioxidantes más altos de todos los que se encuentran en la naturaleza debido a su rica fuente en beta-glucanos, ácido betulínico, melanina y superóxido dismutasa.

Chaga es un ingrediente clave en la fórmula de 5 hongos de Mógū - Sinergia .

Compuestos activos encontrados en Chaga

Los betaglucanos, los endopolisacáridos, los heteropolisacáridos y los homoglicanos son todos polisacáridos que se encuentran en Chaga y son útiles para apoyar la división celular saludable y una respuesta inmune saludable.

Los hongos Chaga tienen los niveles más altos de superóxido dismutasa (SOD) que se encuentran en cualquier alimento natural y son extremadamente ricos en antioxidantes. Otros alimentos como el pasto de trigo, el brócoli y el repollo también contienen SOD pero en cantidades mucho más pequeñas.

Triterpenos: con fuerte influencia inmunofortalecedora. Ácido Trametenólico para diabéticos no insulinodependientes. Inotodiol : un triterpenoide que se encuentra en los hongos chaga y que ayuda al sistema inmunitario a destruir las células anormales.

Esteroles efectivos para la próstata, herpes, lupus, alergias y psoriasis. Triterpenos ligados a lanosterol efectivos como vacuna contra la gripe y para aplicaciones antitumorales.

Ácido betulínico que estimula la apoptosis, provocando que las células cancerosas se destruyan a sí mismas. Está clínicamente probado que tiene beneficios antitumorales y reductores de tumores, y sirve como agente quimioterapéutico. Recientes estudios clínicos muestran que el Ácido Betulínico posee valiosas propiedades farmacológicas tales como: inmunomoduladores, antibacterianos, antioxidantes, antivirales, antitumorales, antipiréticos, entre otros.

Lanosteroles: exhibir una fuerte citotoxicidad hacia las células de carcinoma. Ayuda a reducir el colesterol y reducir la candidiasis. Antibacteriano.

Ergosterols : Esta vitamina es necesaria para la construcción de nuevas células de la piel, así como huesos, dientes y cabello. Esta vitamina regula el recambio celular y se utiliza en derivados recetados para ayudar a controlar la psoriasis. Derivados efectivos para la terapia antioxidante y fármacos contra el cáncer.

La melanina producida por el hongo Chaga demuestra altos efectos antioxidantes y genoprotectores. La melanina mejora la apariencia del cabello, la piel y los ojos y restaura una apariencia más juvenil.

Saponinas: han demostrado tener actividad antiinflamatoria y antioxidante.

Principales vitaminas y elementos minerales: vitaminas del complejo B, vitamina D, potasio, rubidio, cesio, fibra, cobre, selenio, zinc, hierro, manganeso, magnesio, calcio

Péptidos, proteínas y gliconutrientes : moléculas de señalización para enlaces de hidrógeno y otras interacciones electrostáticas, mejorando la función articular y la reducción del dolor. Los gliconutrientes juegan un papel clave en el apoyo de su sistema inmunológico y promueven una comunicación efectiva de célula a célula.

Aminoácidos: El hongo Chaga contiene 19 de los 20 aminoácidos requeridos por los humanos, lo que facilita la construcción y reconstrucción de proteínas, lo que lo hace más fuerte y lo mantiene flexible.

Otros miconutrientes